La bella ciudad de Edimburgo se encuentra a orillas del río Fiordo de Forth y es la capital de Escocia. Su clima es marítimo moderado, con inviernos no tan fríos y frescos veranos.
Edimburgo es visitada por millones de turistas anualmente, ya que se trata de una ciudad con un precioso conjunto arquitectónico que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Los primeros vestigios que se conocen de Edimburgo como ciudad datan del siglo X, en una proclama realizada por David I de Escocia, que dio lugar a la Iglesia de la Holy Rood de Edimburgo.
La ciudad de Edimburgo se divide en distintas áreas. Por un lado, se encuentra el área del centro histórico de Edimburgo. Aquí podrás conocer los bellos parques de Princes Street Gardens y el Castillo de Edimburgo, ubicado en el conocido Castle Rock. A su vez este lugar se divide en Old Town y New Town.
Old Town se caracteriza por un trazado medieval y una imponente arquitectura de la Reforma Protestante. Debes tomar las calles Closes y Wynds, que serpentean la calle principal formando misteriosas encrucijadas. Desde aquí podrás salir a las a distintas plazas. En una de ellas se encuentra la impactante Catedral Saint Giles, la más importante de Edimburgo.
No dejes de conocer el Museo Real de Escocia, Surgeons' Hall y la Universidad de Edimburgo, que data del medioevo. Otro paseo muy recomendable es perderse en las callejuelas subterráneas de Edimburgo.
Por otro lado, se encuentra New Town, construida en el siglo XVIII para solucionar los problemas de densidad de población que sufría Old Town. Aquí encontrarás una gran cantidad de hoteles, restaurantes y modernas discotecas. Para ir de compras, debes tomar Princes Street y Queen Street, donde se encuentran exclusivas tiendas.
Los amantes de la cultura no pueden dejar de conocer la Galería Nacional de Escocia. Entre sus distintas colecciones, se pueden conocer obras de Rafael, Gauguin, Botticelli y Velázquez, entre otros.
Un momento ideal para conocer esta bella ciudad escocesa es en el mes de agosto, cuando se realiza el Festival Anual de Edimburgo. Aquí podrás disfrutar de producciones teatrales y musicales de primer nivel. Asimismo, sobresalen el Edinburgh Film Festival y el Edinburgh Art Festival.
La gastronomía local de Edimburgo es muy similar a la cocina inglesa, pero le agrega sus propios sabores distintivos. Productos como la carne de vaca de Aberdeen y el cordero son los pilares de esta cocina. Se los prepara de diferentes formas, previamente sazonadas. También cumplen un rol importante las carnes de venado, la perdiz y el faisán. El pescado también es un alimento esencial de la cocina escocesa, donde sobresale el salmón.
A la hora de ordenar, no dudes en probar Arbroath Smokies, los Finnan Haddies, el Cook a leekie, que es pollo guisado con puerros; el Scotch Broth, un delicioso guiso de verduras, y el Haggis, un budín con puré de patatas. Las truchas y arenques rebozados con harina de avena son un verdadero manjar.
Para un aperitivo, es ideal degustar el queso Cheddar de elaboración artesanal. Para el postre, es muy recomendable probar una mezcla de nata, harina de avena y frambuesas conocido como Cranachan; o las Oatcakes, deliciosas galletas de avena que se acompañan con miel, queso y frutas. Como no puede ser de otro modo la bebida local por excelencia es el whisky de malta, en Edimburgo encontrarás marcas de primera calidad.